"BAJOCERO" a una semana

Si por pedir fuera, pediría que el tiempo nos conceda una tregua esta semana y Zeus en su divina magnificencia, quede aparcados rayos y truenos. Que la lluvia no empañe los caminos y por seguir pidiendo que el cielo se despeje y las estrellas traigan la helada en la mañana, así el día 18 hará honor a su nombre la "BAJOCERO".
Hoy así amanecía, y con dos grados bajo cero, partíamos en compañía del grueso del club y alguno suelto del masmadera, que siempre es buena compañía, decidimos hacer el recorrido corto que nos abre los pulmones con la tempranera subida a las vacas, lo siguiente aunque llano te hace estar muy atento al camino por tratarse de un terreno con piedras. y llegando a Traspinedo por la bajada anterior a las bodegas. se normaliza el grupo y empieza una de las zonas que a pesar de no ser muy dura, es cuanto menos laboriosa, y así hasta otra bajada que nos lleva a Santibañez.

Seguimos por zona llana de pinar y buen camino, y sorteando un pequeño sendero nos damos contra la carretera que une Santibañez y Montemayor. Aquí surgen las dudas y surgirán el día de autos, larga o corta, esa es la cuestión. Hoy era de prueba y alguien dijo de subir la famosa piedra, y así nos adentramos en las arenas que hacen de frontera con la zona que llamamos Asturias, para el que no lo conozca, el lugar te transporta nada más entrar en el a otros lugares propios de la geografía de un lugar llamado Asturias. Bonito donde los haya, divertido en su recorrido y duro lo que quieras hacerlo tu, hay allí un lugar de cruces de caminos donde es parada obligatoria de todo transeúnte, allí es donde la derecha te lleva a la piedra, que al final desestimamos, la izquierda al recorrido largo y de frente a las subidas mas bonitas de la ruta, por decisión se quedó en hacer la primera subida y volvernos al recorrido desconocido para nosotros de la ruta corta de este año.

Asi se hizo y así sin parar esta vez en Montemayor, nos subimos al páramo en dirección Traspinedo y de vuelta a casa, aún lejana. Al acercarnos al monte que por allí transcurre, una cinta de lado a lado del camino, nos advierte de "PELIGRO MONTERÍA". por instinto paramos y tengo que decir que fueron los más jóvenes razonaron y nos hicieron desistir de seguir, haciendo caso de la advertencia. Hubo suerte y al poco de retroceder, los coches de la montería nos dicen que no había empezado la caza aún y que nuestras vidas no corrían ningún peligro, solo la imaginación de algunos nos hizo ver a los monteros soltándonos al monte ellos subidos en los coches con sus rifles persiguiendo a  sus presas tal y como nos cuenta la película "LOS JUEGOS DEL HAMBRE"....Risas y buen ritmo por si acaso.
Bajamos a Traspinedo, y tomamos café como manda la tradición y dirección Sardón para llegar a puente hinojo y empezar la senda del Duero, que también tiene su labor y que hoy lucía un espectacular paisaje otoñal.
Se terminó donde siempre, en la taberna con un vaso en la mano y con buen sabor de boca tras la buena mañana de bici.
Las fotos podéis verlas AQUÏ